En casa de Enrique Cadícamo - Octubre de 1981 |
Repasemos algunos y veamos cómo los no confianzudos y los
abstemios, sin proponérselo, pueden llegar, también, a tomárselo todo: uno se
puede tomar las cosas a pecho o se las puede tomar a risa. También se puede
tomar la vida en solfa o tomársela en serio, así como se puede tomar el tiempo,
tomar el toro por las astas o tomar el rábano por las hojas.
Centurión escanciando vino de Pompeya |
Uno podrá, también, tomar frío, tomar mate, tomar aire, tomar
distancia, tomar asiento, tomar envión o tomar un taxi; tomarse el olivo, tomarse
el aceite, tomarse el piro, tomarse el espiante, tomarse el raje, tomarse el
buque, tomarse el Conte Rosso, tomarse las de Villadiego o, simplemente, tomárselas.
En resumen: evitar tomar una cosa por otra.
Y si aquí hay un cuento que viene a cuento ese es Casa
tomada, de Cortázar; pero si hablamos de tango, el que se impone es Tomo y obligo.
"Tomo y obligo" - Tango - Canta Carlos Gardel
Letra: Manuel Romero - Música: Carlos Gardel
Escena de la película "Luces de Buenos Aires"
Letra: Manuel Romero - Música: Carlos Gardel
Escena de la película "Luces de Buenos Aires"