jueves, 4 de junio de 2015

ACERCA DE LA PALABRA MINISTRO

No obstante saber bien que para un ministro no hay nada más importante que su propia cartera, y que el que hoy lo es de Relaciones Exteriores mañana lo puede ser del Interior, y que a cada ministro le llega su ministerio de Economía, abro el diccionario en la eme buscando una definición y leo: ministro, juez que se emplea en la administración de justicia / El que está empleado en el gobierno para la resolución de los negocios políticos y económicos / Jefe de cada uno de los departamentos en que se divide la gobernación del Estado, el cual es, en el régimen constitucional, responsable de todo lo que en su respectivo ramo se ordena. Nómbralo el jefe del Estado, cuyos decretos refrenda, para que se estimen válidos y legítimos.
Hasta hace aproximadamente sesenta años, la palabra ministro, por asociación con mino, tuvo vigencia lunfarda con el significado de “homosexual pasivo”. Después cayó en desuso.
Y aquí recordemos que la palabra “ministro” viene del latín, minister, con el significado de “sirviente”, “criado”, o sea lo opuesto a magister, magistrado, alto dignatario. 
Y en este concepto está la idea de que los ministros deben servir al magistrado y al pueblo, aunque  quieran hacernos creer lo contrario.